jueves, 1 de agosto de 2013

CONSEJO GLADIADORA...FUERA CELULITIS... ¿Cómo combatir la celulitis? La celulitis se conoce como el acúmulo de tejido adiposo en determinadas zonas del cuerpo, formando nódulos adiposos de grasa, agua y toxinas. Las zonas más afectadas son las piernas y las nalgas, aunque también puede localizarse en el vientre y los brazos. Es resistente a las dietas y aparece tanto en personas más gruesas como en personas delgadas. La llamada también piel de naranja crea un efecto antiestético que muchas mujeres tratan de combatir. Veámos que técnicas para combatir la celulitis podemos usar y cuales son más o menos efectivas. Los tratamientos para combatir la celulitis... Si no estás muy segura de que cremas anticeluliticas funcionan mejor o peor no te puedes perder nuestra selección. La celulitis no sólo se combate con cremas, la mesoterapia es también una técnica eficaz. Uno de los mejores inventos de los últimos años en cuestión de tonificación son las Reebok Easytone. Tonifican tus glúteos mientras caminas. Los tratamientos mecánicos La endermología o Cellu M6 es un masaje que se realiza con una máquina que succiona un pliego de piel y lo trabaja con ligeros movimientos con el objetivo de activar los intercambios celulares, eliminar los residuos y provocar que la grasa circule de nuevo. Este método francés es una de las técnicas para combatir la celulitis más extendidas en todo el mundo y se aplica en sesiones de unos 30 minutos una o dos veces por semana. La presoterapia es una técnica que ha ganado muchas adeptas en los últimos años. Se trata de un drenaje linfático realizado con una máquina de aire pulsado que hincha de forma progresiva y ascendente un par de botas, que cubren desde los pies hasta la parte superior de las piernas. El objetivo es activar la circulación venosa y linfática. La presoterapia se aplica en sesiones de unos 40 minutos y es también un arma eficaz contra la retención de líquidos. Otra opción para acabar con la celulitis puede ser la mesoterapia. Esto consiste en inyectar de forma subcutánea productos que actúan sobre la celulitis. Se recomienda sobre todo en casos de problemas circulatorios y celulitis difusa. La liposucción, por su parte, se realiza con anestesia. y consiste en aspirar el exceso de grasa subcutánea. Sin embargo tienes que tener en cuenta que no deja de ser una operación, y además sólo funciona sobre cierto tipo de celulitis. Aunque esta opción no asegura borrar por completo el antiestético efecto de la piel de naranja. La electroterapia y la ultrasonolipolisis Los métodos más punteros utilizan las corrientes eléctricas, los ultrasonidos o los infrarrojos. Se aplican gracias a unos electrodos que se colocan en las zonas que se quieren tratar o mediante aparatos dispuestos sobre la piel. Como consecuencia, se producen en la piel tres efectos: se eleva la temperatura de los tejidos en cuestión, se aumenta la permeabilidad celular de los adipositos y se desfibran los tejidos conectivos presentes en la hipodermis. En definitiva, estas técnicas mejoran notablemente la circulación sanguínea, lo que permite liberar toxinas y hacer más fácil la llegada del oxigeno necesario a la piel para mejorar el aspecto de la piel de naranja. Las cremas, cada vez más eficaces, emplean activos drenantes para luchar contra la retención de líquidos y desatascar los tejidos, quemar grasas (cafeína) y alisar la piel. Son de triple acción: limitan la hinchazón, reducen el número y el volumen de los adipositos, y mejoran el aspecto cutáneo. Lo ideal es aplicarlas dando un masaje alternando movimientos de drenaje y de rodillo, siempre de arriba abajo. Los tratamientos más novedosos La carboxiterapia es una de las últimas técnicas para combatir la celulitis. Consiste en inyectar por vía subcutánea anhídrico carbónico (CO2) con una fina aguja y acompañado de un masaje. El resultado, es la mejora del flujo sanguíneo y la movilización de grasas incrustadas, por lo que mejora notablemente el aspecto de la piel y disminuye el volumen y la pesadez de las piernas. Otra técnica nueva es la ozonoterapia. Se trata de un método poco conocido pero muy efectivo. La ozonoterapia consiste en inyectar gas ozono en las zonas donde se encuentra la celulitis. Bajo la piel, este gas tiene la capacidad de agredir la cadena de ácidos grasos insaturados y convertir las moléculas grasas de lipófilas a hidrófilas, con lo que se facilita mucho su eliminación. Se practica en centros de talasoterapia, en spas o centros termales. El aquadrenaje linfático es una de las técnicas más reclamadas consistente en una gimnasia específica que se practica en el agua. El objetivo es reforzar los músculos posturales, pues su acción sobre los retornos venosos es cuatro veces superior a la de los músculos superficiales. Los baños de hidromasaje y las duchas de chorros, por su parte, estimulan los retornos venosos y linfáticos. Y los chorros submarinos garantizan un drenaje aún más potente que el linfático manual gracias a la potencia de acción que ejerce el agua sobre el cuerpo. Los complementos alimenticios Disponibles en comprimidos, cápsulas o infusiones, algunos de sus activos son también efectivas técnicas para combatir la celulitis: > Los drenantes, para eliminar los residuos y desatascar los tejidos, entre los que destacan: mate, achicoria, ortosifón, castaña de Indias, vino tinto, cola de cereza, o ulmaria. > Los quemadores de grasas, para activar la combustión y la evacuación de las grasas, presente en: CLA (ácido linoleico conjugado), té virgen o café verde. Y lo más sencillo > La alimentación. Para evitar la aparición de la celulitis no hay que coger sobrepeso ni seguir dietas monótonas porque fomentan el almacenamiento de grasas. Además, tienes que evitar el abuso en tu menú de los platos preparados, los quesos y la charcutería, la sal, las grasas cocidas, los fritos, los azúcares lentos refinados (pan blanco) y los alimentos que contienen caseína (yogures, queso blanco). Por su parte, los productos más adecuados para combatir la celulitis son la carne magra, el pescado azul, las frutas y verduras frescas y secas y el arroz. > El deporte. Los estudios demuestran que practicar una actividad muscular ayuda a combatir el efecto piel de naranja porque se refuerzan los músculos profundos y superficiales, y se mejora la circulación sanguínea. En definitiva hay que procurar encontrar el equilibrio en nuestro organismo, potenciando la realización de deporte tanto como sea posible y cuidando nuestra alimentación para no ingerir un exceso de grasas que, entre otras cosas, pueden causarnos la temida celulitis.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Te ha gustado el artículo? ¿Añadirías o quitarías algo?
¡Déjanos tu opinión!