martes, 18 de diciembre de 2012

Biografía de Alejandro, "gladiador hispano-romano" (III)

"En busca del gimnasio perfecto"

El culturismo profesional de la época, no era como el de ahora. Eran cuerpos más estéticos y aerodinámicos, parecían "Obras de arte" en aquellos años. Y yo, al no haber visto nunca algo así me resultó algo excesivo,pero éste deporte tiene algo y digo "algo" porque te engancha y te apasiona, pero como todo lo que engancha y apasiona, puede volverse en tu contra.Creedme y no exagero.

La visión de ese "super culturista" me motivó más, hasta el punto de ir al gimnasio por primera vez. No quería seguir entrenando en casa por miedo a lesionarme y doy gracias que no fué a peor lesión (más adelante os explico el porqué). Madre mía, que ilusión me hizo ir a un gimnasio,tuve que bsucar por páginas amarillas (en mis tiempos solo había eso nada de internet ni del 11888) y el problema era que había muy pocos en aquellos años, hablo del 1986.

Busqué y fué muy difícil porque los gimnasios de entonces, eran sitios oscuros, había autenticas leyendas como "Francisco del Hierro" y "Salvador Ruíz" y poco más.Todo lo demás el que no la daba de un lado lo daba de otro. Fuí a uno que, cuando lo conseguí encontrar, parecía la entrada de un club barato con cartel de matrícula que ponía "gimnasio". Chicas y chicos, mientras, cuento podéis preguntar lo que queráis vale?



Bueno, al entrar al gimnasio me recibió un gordo con el cinturón de entrenamiento apretado a lo Julian Muñoz, ya sabéis intentando el hombre impresionarme.Era gracioso porque mientras me informaba de los precios y me enseñaba las instalaciones, veía que el cinturón a lo Julián Muñoz no le dejaba respirar. Pensé, madre mía!! que hombre tan patético ¿y éste es quien me va a poner fuerte? solo me puede explicar como comer donuts mientras haces press de banca jeje.

Primera lección que aprendí para mi futuro trabajo: "la imagen es lo primero" para dirigir un gimnasio y sobretodo pensé, si un día monto un gimnasio, no será así, será "especial" y así empecé, pero no en ese gimnasio sino en uno que había al lado del instituto de mi hermana (aprovechando que iba a acompañarla) era de noche iba y entrenaba.

Os diré algo, que sensación más curiosa, nervios, curiosidad, supe que yo tenía que vivir de ésto y tenía ganas de aprender y muchas! Me lo tomé en serio, como el que va a la universidad, todo lo que sé, lo sé por "zorro viejo" aunque no lo sea, pero sí entrenando y levantando pesos. No había monitor y yo tenía alguna idea y sobre todo "fuerza" (recordad los sacos de limones cebollas, patatas y castañas jeje) y sobre todo unas piernas muy potentes para mi edad.

Recuerdo que mi entreno era agotador,hacía lo que veía en revistas pero yo aplicaba mis propias técnicas,repeticiones, pesos descansos y una cosa nueva para mí, "el descubrir como comían los culturistas" por fin lo vi en una revista que lo explicaba. El chico de color, y el chino que fabricaba motos (es broma), Lee Hanley. Y nada, me lo tomé a raja-tabla. Porque antes solo sabía lo que veía en la tele y en algún articulillo de alguna revista y claro, si un día de pequeño veía en la tele que el jamón era bueno para desarrollar, pués ala, venga jamón , que decian que el atún, sardina, caballa eran buenos para el músculo pues yo a "jartarme"! y así hasta que ví "Dieta de un culturista" de Lee Hanley ,aunque al principio me pareció raro..ahi me hizo sentirme "culturista" cosas de principiante ya sabéis........

2 comentarios:

  1. Anónimo8:06

    Ya estoy esperando la tercera entrega Alejandro!!

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  2. Anónimo9:53

    MUY BUENO
    ESTOY ORGULLOSO DE IR A TU GYM

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